Habré escrito noticias, relatos, cuentos, reportajes, artículos de opinión, pero nunca se me había ocurrido parame a escribir sobre una fotografía. Siempre que he visto una foto, he recordado el momento o el viaje, pero en esta ocasión, va a ser una experiencia diferente.
Todos los que hayan tenido la oportunidad de ir a la ciudad de los sueños, estarán de acuerdo con las siguientes líneas.
Un gran contraste, de hecho, una maravillosa comparación. El verde del parque combinado con la altura de los rascacielos. Podemos pensar también en una enorme contaminación en esta ciudad, sin embargo, todo lo que la gran manzana tiene, compensa perfectamente todos sus inconvenientes.
Edificios, parques, gentes, ruidos, taxis amarillos, culturas, olores, colores, negocios, moda, magia, cine, luces. Puede que a muchos no les atraigan estas palabras, pero solo hay un lugar en el mundo que las recoge todas ellas en una sola frase: Nueva York. Ha sido el escenario de muchas películas, de muchos eventos, y lo seguirá siendo para siempre. Muchos cantantes han dedicado canciones a sus calles y a sus noches. Uno de los grandes de la música la describió con esta frase: La ciudad que nunca duerme.
Lo mejor que te puede pasar al llegar allí es que sea de noche. Coges un taxi y suena en la radio “Empire State of mind”, de Alicia Keys. Entonces aparece ante ti la ciudad, la ciudad de los sueños. Y ese es el momento en el que te asombras. Te quedas perplejo con esa majestuosidad que ha sido construida por el hombre. Nunca habías imaginado ese momento de esa forma. Piensas: solo en las películas pasan estas cosas. Pero sí, en ese momento estás viviendo tu propia película. Ese es un momento único, es un instante que no vas a olvidar nunca, es el momento en el que la ciudad te envuelve. Manhattan con su Empire State, con su edificio Chrysler, el inmenso Hudson, los carteles de Times Square. Sin duda, desde ese mismo segundo estás siendo el protagonista de una de las tantas historias que ha visto esa metrópoli. Nunca te has sentido igual, nunca habías imaginado que podías tener música de fondo.
Un lugar único. Un lugar al que a una persona le gustaría ir mil veces. Yo lo descubrí hace dos años e iría en cada oportunidad que tuviera. Para mí, es uno de los lugares más especiales y más maravillosos de este mundo. Es una ciudad que admiro, es un sitio en el que me perdería para siempre.
Como dicen muchos “If I can make it here, I can make it anywhere”. Todos somos dueños de nuestros sueños y todos podemos hacerlos realidad en cualquier rincón del mundo. Eso sí, si los podemos hacer realidad en Nueva York, podremos conseguirlo en cualquier otra parte.
Paz Olivares.